Desde los años 90, los vestidos de novia se han convertido en materias primas para un cuerpo de obras que difundían los sentidos de lo femenino. Al final de esta década, Beth Moysés amplió el alcance de su trabajo. Elaboró performances en que reunió centenas de mujeres sintonizadas con una actitud política de demanda afectiva y lucha contra la violencia. Desde entonces, la artista ha extendido gradualmente su campo de acción, dedicándose al amor en toda su universalidad, complejidad y urgencia, en su condición de elemento definidor de la propia especie humana. En la presente exposición, Moysés ocupa el espacio de la galería con un repertorio de videos, objetos y fotografías, volcados a la orquestación de deseos y sentimientos polifónicos. Las paredes del local se convierten en pieles vivas, porosas y pulsantes. Sobre pedazos de tejidos blancos se graban frases, en rojo, con declaraciones de 300 mujeres brasileñas y españolas, ricas y pobres, jóvenes y ancianas. Mujeres. Igual que venas y arterias, las palabras laten pedidos, desahogos, afectos y dolores. Exvotos literarios, las frases claman verdad, libertad, alegría, respeto, comprensión, fidelidad, comunicación, amistad, complicidad, caricias. A veces trasbordan tristes testimonios, llenos de esperanza por redención.
Katia Canton